Voto por correos elecciones 23J ¿Qué pasa en la red de oficinas?

Las solicitudes de voto por correo para las Elecciones Generales del 23 de julio están desbordando las magnitudes de otras campañas electorales, principalmente por el hecho de que los comicios se celebren en periodo vacacional.

Las cerca de 400.000 solicitudes admitidas al cierre de la primera semana han puesto patas arriba el paradigma del proceso de admisión del voto y las cifras manejadas en anteriores elecciones, siendo previsible superar ampliamente los 2 millones. Esto hará aumentar más si cabe la presión que ya se venía ejerciendo sobre el personal de ventanilla y sus cuadros en el cumplimiento de unos objetivos comerciales en absoluta contradicción con los medios materiales, tecnológicos y humanos, el apoyo comercial y las herramientas puestas a su disposición.

Un elemento a considerar respecto a otros comicios es que una buena parte de quienes lo solicitan lo hace por primera vez, obligando al personal de las oficinas a explicar, desde el minuto cero, cuestiones básicas relacionadas con el impreso de solicitud y hasta con el domicilio a consignar. La más que probable obligación de identificar al depositante del voto va a requerir un esfuerzo adicional en tiempos de atención. Una y otra cuestión requieren los medios tecnológicos, materiales y humanos necesarios apoyando, no entorpeciendo, el trabajo de las oficinas.

También de una adecuada incentivación de un proceso que para este personal se desarrolla desde el momento de su publicación hasta, en muchos casos, el mismo día de las elecciones, es decir, durante más de 50 días, por una mezquina “gratificación” de 121€ que retribuye la presencia del empleado en la oficina durante las dos últimas semanas de campaña, con independencia del número de solicitudes, documentaciones y votos gestionados.

Para estas elecciones Serrano ha anunciado a la prensa un total de 5.500 contrataciones. Dado que en su mayoría los contratos se están haciendo en tiempo parcial de 4 horas, el número real de efectivos equivalentes no alcanzará los 4.000. Al margen de lo escaso e insuficiente de estas contrataciones, se está recurriendo a triquiñuelas para hurtar a las oficinas los refuerzos prometidos con el fin de generar ahorros que permitan hacer más digerible el desastre económico ocasionado -también aquí- en la Red de Oficinas, por la gestión de Serrano y la dirección del Área que nombró a dedo, tras una limpieza étnica inaceptable de profesionales que no comulgaban con su Plan porque carecía de sentido y anunciaba el desastre producido: 94 millones de ingresos perdidos en el periodo 19-22, uno de cada cuatro euros; 13 millones de visitas menos en el mismo periodo; 976 (uno de cada 10) puestos de trabajo menos a la vez que se avanza por la senda de los contratos a tiempo parcial que UGT rechaza de plano.

El caso más elocuente es La Gerencia de la Zona Centro que, con el beneplácito de no se sabe quién, ha lanzado una encuesta “abierta para todo el

Loading