Tras el constatado bloqueo absoluto de la negociación del convenio estatal de mayoristas de productos farmacéuticos después de 16 meses de negociación, las organizaciones sindicales UGT, CCOO y USO representadas en la mesa negociadora hemos mantenido una reunión de coordinación con los sindicatos CGT, CIGA y CSIF, también presentes en el sector, a fin de dar inicio a un proceso de movilización en las empresas.
El sector de la distribución farmacéutica es un sector regulado y protegido, cuyo principal cliente es la oficina de farmacia, pero cuyo mayor financiador es el estado a través de las recetas médicas. Otra particularidad de este sector es que los farmacéuticos, además de ser clientes son también los propietarios de la mayoría de las grandes distribuidoras de medicamentos del país, las cuales tienen, con pocas excepciones, la estructura jurídica de sociedades cooperativas de farmacéuticos.
La sociedad española es conocedora del importante papel que toda la cadena de distribución de productos sanitarios ha jugado durante estos años de pandemia. Las personas trabajadoras del sector somos aún más conscientes del ingente esfuerzo realizado de forma permanente y, en especial, durante la pandemia y el confinamiento, para garantizar el abastecimiento puntual de medicamentos a las farmacias, incluidos los test y artículos de protección ante el COVID-19.
Las empresas de este sector, ya de por sí protegido y privilegiado, han obtenido durante estos dos últimos años y a expensas del esfuerzo de sus plantillas y de la crisis sanitaria, niveles de facturación y de beneficios de récord absoluto. Aun así, se niegan en redondo a aceptar un convenio digno para las personas trabajadoras del sector, cuyo salario base ronda a día de hoy, en el grupo 4 que es el más amplio que conforma las plantillas, niveles próximos al SMI. Es más, dichos empresarios no tienen el menor escrúpulo en sostener que el actual incremento desbocado del IPC lo hemos de pagar, prácticamente en exclusiva, los trabajadores/as. Protección y dinero público para llenar los bolsillos de los propietarios y altos directivos de las empresas y precarización, y empobrecimiento sin fin para los trabajadores/as. Esa es la fórmula que defiende FEDIFAR, patronal que agrupa a las principales empresas del sector.
¡¡¡LAS PERSONAS TRABAJADORAS DECIMOS QUE HASTA AQUÍ HEMOS LLEGADO !!! Las organizaciones sindicales de la mesa negociadora CCOO, UGT Y USO, con el apoyo de todos los sindicatos del sector, HEMOS ACORDADO CONVOCAR CUATRO JORNADAS DE HUELGA en las empresas del sector los días 30 de mayo, 1 de junio, 6 de junio y 1 de julio. Esta convocatoria de huelga, que se explicará con más detalle en el proceso de asambleas que se iniciará en los centros de trabajo la semana que viene, irá acompañada de todas aquellas otras medidas de presión sindical y visualización que se debatan y acuerden en el transcurso de los próximos días. Esta convocatoria de huelga, no es sólo para este convenio, es para los futuros también, es para parar y ¡DECIR NO!, a la degradación de derechos y salarios que persiguen las cooperativas y empresas del sector.
