El 8 de marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer, declarado por las Naciones Unidas en 1975. El origen de esta conmemoración data del 8 de marzo de 1857, donde miles de trabajadoras textiles de EEUU decidieron salir a las calles de Nueva York con el lema ‘Pan y rosas’ para protestar por las míseras condiciones laborales y reivindicar un recorte del horario y el fin del trabajo infantil.
Fue una de las primeras manifestaciones feministas para luchar por sus derechos, sin embargo, el capítulo más cruento de la lucha por los derechos de la mujer se produjo el 25 de marzo de 1911 cuando se incendió la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist de Nueva York, pereciendo un total de 123 mujeres y 23 hombres.
La lucha por la mejora de las condiciones laborales, es el objetivo principal de nuestra Secretaría de Salud Laboral todavía en el día de hoy, estuvo en el origen de esta remarcada fecha que, actualmente, se ha convertido en bandera de la causa feminista y de la lucha por los derechos de la mujer.
De esta forma, desde la Secretaría Federal de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT Servicios Públicos queremos homenajear y felicitar a todas nuestras compañeras, madres, amigas, parejas, mujeres todas, para que por fin se logre una igualdad efectiva que no distinga géneros, con vuestra inestimable ayuda seguros lo conseguiremos.
Desde la perspectiva de la prevención de riesgos laborales también se hace necesaria la incorporación de las cuestiones de género, definida por el Concejo Económico y Social de las Naciones Unidas como “una estrategia para hacer de las inquietudes y experiencias de las mujeres y de los hombres una dimensión integral de la creación, implementación, monitoreo y evaluación de las políticas y de los programas en todas las esferas políticas, económicas y sociales, de modo que las mujeres y los hombres se beneficien por igual y que no se perpetúe la desigualdad”.
En la práctica, la incorporación de las cuestiones de género significa identificar las brechas en la igualdad de género a través del uso de datos desglosados por sexo, la creación de estrategias para subsanar esas brechas, la dedicación de recursos y experiencia para implementar esas estrategias a favor de la igualdad de género, el monitorear su implementación, y el responsabilizar a las personas y a las instituciones de los resultados.
La estrategia comunitaria sobre seguridad y salud en el trabajo para 2002-2006 ya incluyó como objetivo la integración de la dimensión de género en las actividades de seguridad y salud en el trabajo, reconociendo la creciente importancia de las cuestiones de género en el ámbito de la SST.
Los hombres y mujeres, en gran medida debido a los estereotipos socio-laborales, tienden a ocupar distintos puestos de trabajos en el mercado laboral, es la llamada segregación ocupacional entre géneros que consiste en la concentración desproporcionada de mujeres en cierto tipo de ocupaciones y de hombres en otras. Esta circunstancia hace que las mujeres y los hombres estén expuestos a diferentes entornos de trabajo, a diferentes exigencias y tensiones y, por tanto, a diferentes riesgos laborales, lo que unido a ciertas características genéticas como la distinta proporción de grasa corporal, que favorece la absorción de compuestos químicos peligrosos, o la distinta composición hormonal que hace que se reaccione forma distinta a distintos compuestos, por poner solo un par de ejemplos, hacen necesaria tener en cuenta la perspectiva de género a la hora de realizar la prevención de riesgos laborales.
Las diferencias más relevantes, relacionadas con el género, en la incidencia de accidentes y patologías en el trabajo son:
- Las mujeres tienen más probabilidades de padecer problemas de salud relacionados con el trabajo que los hombres.
- Las mujeres padecen más trastornos de las extremidades superiores relacionados con los movimientos repetitivos.
- El cáncer ocupacional en las mujeres aparece de forma más tardía, muchas veces cuando ya se han jubilado.
- El asma y las alergias suelen ser más comunes entre las mujeres.
- Las mujeres padecen más enfermedades cutáneas.
- Las mujeres padecen mayor riesgo de sufrir enfermedades infecciosas.
- Ambos sexos están expuestos a estrés, pero es más significativo entre las mujeres.
- Las mujeres están más expuestas a la intimidación en el lugar de trabajo.
- Las mujeres están más expuestas al acoso sexual en el lugar de trabajo.
Nuestra Secretaría, preocupado por estos temas, ha realizado un estudio sobre las condiciones laborales de las trabajadoras de asistencia a domicilio (ver) y una Guía práctica para la prevención de riesgos laborales bajo la perspectiva de género (ver).
José María Cobano
Secretario Salud Laboral y Medio Ambiente Federal.