UGT rechaza rotundamente la Ley de Empleo Público, aprobada hoy en el Parlamento vasco, y advierte que con los términos acordados en dicha Ley se pierde una oportunidad única para legislar las condiciones laborales y sociales de los empleados públicos.
Arantza Agote, responsable de Servicios Públicos de UGT-Euskadi recuerda las críticas del sindicato a esta ley, que “limita la participación de los representantes de los trabajadores y trabajadoras, y discrimina la participación de toda la ciudadanía por desconocer una de las dos lenguas oficiales. Se trata de una ley -asegura – que establece la figura de los directivos “profesionales”, desvirtuando la objetividad e imparcialidad propia de la función pública,”.
Para UGT, esta ley no establece criterios objetivos para el desarrollo profesional. Es una ley que no da solución a los problemas concretos de los empleados públicos, en la que no se ha tenido en cuenta las alegaciones presentadas por este sindicato, por lo que “sigue presentando los mismos errores que en su primer borrador y, por tanto, no podemos avalarlo»