El cáncer laboral es un problema grave en la Unión Europea y España. Cada año, se producen alrededor de 120.000 casos de cáncer relacionados con el trabajo en la UE, y se estima que en España fallecen 8.700 hombres y 850 mujeres por esta causa.
Sin embargo, la infranotificación de estas enfermedades es un problema importante. En 2022, solo se reconocieron 107 enfermedades profesionales causadas por agentes cancerígenos en España, de las cuales 76 eran debidas al amianto.
Ana García de la Torre, secretaria de Salud Laboral de UGT, ha denunciado la «urgencia de proteger a la población trabajadora de la exposición a cancerígenos en el entorno laboral».
La Encuesta sobre la exposición del personal a factores de riesgo de cáncer en Europa, llevada a cabo por la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo, ha identificado que las exposiciones profesionales probables más frecuentes son la radiación solar ultravioleta, las emisiones de escape de los motores diésel, el benceno, la sílice cristalina respirable y el formaldehído.
Además, la encuesta detectó que el personal de pequeñas empresas o microempresas tenía 1,3 veces más probabilidades de verse expuesto a uno o más factores de riesgo de cáncer que el de empresas medianas o grandes.
García de la Torre ha destacado «la importancia de cumplir con la normativa vigente en materia de prevención de riesgos laborales frente a agentes cancerígenos».
La secretaria de Salud Laboral ha instado al nuevo Gobierno de España a que «tome como urgente la trasposición de la cuarta modificación de la Directiva Europea sobre protección de las personas trabajadoras a cancerígenos y mutágenos en el trabajo».
Por otro lado, también ha reclamado «ambición a los distintos Estados miembro en cuanto a la aplicación de la futura quinta modificación de la Directiva sobre cancerígenos, evitando el periodo transitorio de cinco años que, parece se va a establecer para el valor límite del plomo».
